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Arquitectos: Architekten, Felipe Palacios + Johann Moeller
- Área: 209 m²
- Año: 2021
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Fotografías:Bicubik
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Proveedores: Ecuaroofing, Esacero, GRAPHISOFT, Jens Bokel, TEKNOMUEBLE
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La Casa Doble Soga explora una arquitectura alejada de ejercicios formales y se aproxima a una resolución meditada de poética espacial y constructiva. Constituye una respuesta que articula los requerimientos de una familia joven, potencia las relaciones inherentes del sitio, y revela una cualidad tectónica material condensada en una pieza de elegante simpleza contemporánea de carácter expresivo y cálido.
Un lote de árboles maduros precedía a la intervención arquitectónica: desde el primer trazo se vislumbró la presencia elocuente de la vegetación existente que determinó la posición de los volúmenes que esquivan estratégicamente los árboles, y responden a la condición frontal-posterior del lote.
La predominancia de un aguacate, acompañado de una serie de limoneros dieron la pauta para generar un dromos o pasaje de entrada que actúa como un espacio de transición desde el espacio público al privado, y remata en el umbral natural formado por el dosel del aguacate y el vestíbulo de la casa.
A continuación del vestíbulo, aparece un espacio diáfano de cubierta ligera inclinada que alberga el área social que desea atrapar un chirimoyo, el jardín posterior, y la quebrada. El espacio social se muestra amplio, abierto y flexible. La cubierta de madera levita cobijando un gran living que se abre francamente invitando al jardín hacia adentro. Se recrea un lugar de estancia y de textura material, que exhala frescura y transparencias múltiples. La relación interior y exterior se difumina a través de unas grandes puertas plegables que posibilitan el ingreso del jardín al living, y viceversa.
El carácter de la casa se manifiesta en la predominancia de materiales expresivos como el ladrillo visto, el acero, la madera, y su cuidadosa disposición. Las dimensiones del ladrillo tipo jaboncillo de 27x13x7cm regulan la modulación de las fachadas exteriores e interiores, a través del uso de un aparejo de doble soga que confiere una especial textura a los grandes planos de cerámica cocida. La fachada se construye de una doble pared, detrás del jaboncillo se oculta una cámara de aire ventilada que impide los efectos negativos de la humedad, mejora el confort térmico interno de la vivienda, agrega calidez y reduce la pérdida de calor.
La estructura metálica se expone en lugares estratégicos de la vivienda. Pérgolas, aleros, pasamanos, escaleras, vigas de contorno, y lucernarios fueron cuidadosamente diseñados para que sus partes expuestas no sólo demuestren las cualidades portantes del acero sino también sus cualidades plásticas. El resultado figura una cualidad volumétrica sólida donde el jaboncillo se contrasta a la ligereza de la madera y el acero.
Como remate, se integra al diseño una cubierta habitable, a la cual se accede por medio de una esbelta escalera helicoidal, de cuidadosa fabricación metálica. El usuario experimenta el ascenso desde el exterior de la vivienda. En la terraza, la vista de 360 grados se eleva sobre las copas de los árboles, las cubiertas de las casas colindantes, viaja junto al Ilaló, y remata en el perfil montañoso andino.
